Las brocas, también conocidas en Paraguay como “mechas”, sufren un desgaste normal que las hace perder el filo.
Una leve pérdida del filo reduce la calidad de la perforación y una mecha totalmente desafilada, además de dañar la pieza de trabajo, es un gasto de energía y tiempo del taladro y del operario.
Un sencillo afilado puede recuperar la broca y mejorar los resultados del trabajo.
Imagínate cuánto cuesta en dinero y en tiempo comprar unas nuevas brocas.
